Obama, «again»

Imagen extraída de paraguay.com

Puede que nos pille lejos y que a nosotros ni nos va ni nos viene que es lo que hagan los norteamericanos con sus políticos, pero es evidente que en esta «aldea global» cualquier estornudo de allí puede convertirse aquí en huracán.

En definitiva, tengo que reconocer que aunque en general aborrezco la política y a todos los de su especie, estos días le he prestado cierto interés a las elecciones de Estados Unidos y respiré aliviada cuando al día siguiente de las elecciones, leí por la mañana en el periódico digital que el presidente Barak Obama había sido reelegido.

No es que tenga yo demasiado interés en este señor en cuestión, sino más que nada, porque me aterra como últimamente van ganando posiciones en todo el mundo las posturas más radicales que defienden abiertamente el racismo, la xenofobia, el machismo… y así un largo etcétera que pone los pelos de punta a cualquiera «con dos dedos de frente». Actitudes que a estas alturas del siglo XXI una creía que deberían estar superadas, pero sucede todo lo contrario.

Por eso me alegro de que no haya salido otro facha como Bush, que aquí (en España) últimamente ya andamos sobrados.

Perdonen ustedes la frivolidad, pero también tengo que admitir que con estas elecciones norteamericanas se me ha caído un mito. Casi me da algo cuando veo al actor Clint Eastwood defendiendo la causa republicana. Bien es verdad que en sus papeles de «hombre duro» el tipo parecía medio salvaje, pero luego hay «joyitas» como Los puentes de Madison, por ejemplo, en el que da muestras de una especial sensibilidad, hasta con la música de la película. Siempre me ha gustado como actor; pero está claro que no es oro todo lo que reluce, que le vamos a hacer.

Ya sé que en general los políticos mienten y que todo es pura estrategia electoral; pero estoy tan harta de que en estos últimos años la gestión de estos cafres haya influido tanto en mi vida: paro, crisis, desánimo… que quiero creer que eso de que «lo mejor está por llegar», como proclamaba el flamante ganador Obama quizá pueda ser cierto.

2 comentarios

  1. No olvides que toda esa especie que aborreces ( estoy contigo ) no es otra que «nuestra especie», los políticos españoles no son sino el reflejo de su sociedad, ni más ni menos.
    Sobre posturas radicales te diré que pareces que defines al mundo musulmán cuando entiendo que lo haces al norteamericano, esos que no son unos angelitos pero que a Europa le han sacado las castañas del fuego muchas veces, repito, muchas veces.
    En fin estoy contigo nuestros políticos son unos jodidos cafres, y de los gordos, para muestra un botón.
    Saludos.

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