La superviviente Lacanes

Te sientas, abres la novela y empiezan a salir temores y miedos que todos hemos tenido en algún momento. Es la presencia clara de una realidad distópica, alejada de la tranquilidad de la zona de confort que nos viene dada por la rutina.
Lacanes activa una y otra vez aquella pregunta con la que tantas veces he empezado mis clases de pensamiento creativo ¿qué pasaría sí…?
En 2002 una nube se ancló sobre Santa Cruz. Las lluvias ocasionaron 8 muertos, 12 desaparecidos y decenas de heridos. Además de las pérdidas humanas la riada causó cuantiosos daños materiales, 70.000 personas sin luz así como la destrucción total o parcial de al menos 400 viviendas. Las pérdidas se calcularon en 90 millones de euros. Recuerdo cómo las entradas a la ciudad se bloquearon con vallas y cintas de precinto y no se permitía el paso, en aquella época vivía en Candelaria y trabajaba para AtlánticoCanarias.com, me salté los controles y caminé por una ciudad devastada, no había luz eléctrica y no circulaban coches por las ramblas ni por la Tres de Mayo, resacada la ciudad tras una noche de lluvia brutal.
Mas tarde, en 2005, como redactor de Medio Ambiente del Diario de Avisos, me enfrenté a las devastadoras consecuencias de la Tormenta Delta. Las islas quedaron arrasadas por un temporal que destrozaba todas las previsiones, algo totalmente inesperado en Canarias. En aquel viaje iniciático al periodismo de campo, sin esperarlo, mi cabeza no hacía sino construir escenarios caóticos de una ficción que nunca puede llegar a representar a la crudeza de la realidad.
Estos días he revivido todo aquello leyendo estas páginas, porque incluso en esos años la autora de las mismas estaba ya presente de manera indirecta en mi vida. La distopía de ese escenario tan reconocido y tan desconocido al mismo tiempo me han sobrecogido mucho el corazón. Aún así me tranquiliza percibir siempre la presencia del amor entre los cortinajes del decorado del libro. En aquellas ocasiones, en ambas, tras entrevistar a vecinos y afectados percibí rabia, indefensión, impotencia, pero también tras todo aquel dolor también percibí la presencia del amor.
Además de esa irrealidad brutal en la que he encontrado claves y vinculaciones reales veo muchas obras literarias que entiendo han sido manejadas. Una y otra vez me viene a la cabeza Ralph de El señor de las Moscas de William Goldwing, o incluso veo a Lacanes como una especie de Mad Max en su eterna búsqueda por un terreno inhóspito. Y hasta el guion de la reciente serie de televisión The Leftovers en la que otra dimensión nos oculta la realidad que tenemos frente a los ojos.
Estos días hemos vivido noticias duras, sobre el miedo y la falta de empatía entre las personas, sobre la violencia, incluso contra los animales cuando veíamos cómo un policía abatía a una perra disparándole a bocajarro. Hace mucho que asistimos a una antesala de un mundo por venir, desde que se identificaron, hace más de 20 años ya, los fenómenos de El Niño, un mundo arisco y doloroso cubierto de temporales y lluvias violentas, o sequías extremas. En Garachico hace unos días el mar rompió con esta tranquilidad heredada y nos avisó del perpetuum mobile de la naturaleza. Pero al fin y al cabo, en todos esos escenarios posibles o posibles escenarios queda el ser humano, los sentimientos, el amor. Lo que mueve el mundo, lo que nos hace supervivientes, como Lacanes.

Lacanes, historia de una superviviente es una novela de Alba Aguiar, Tenerife, 1989. Graduada en Filología por La Universidad de La Laguna. Sus cuentos Una huida más, Por primera vez, El sueño y La reunión fueron publicados en La Gaceta de Canarias en 2008, periódico en el que trabajó.
Mención especial en Cruzarte 09 con el relato La condena del verdugo. Una enorme bola de demolición es seleccionado para el libro de textos de los alumnos Y así sería para siempre, editado por la Escuela Canaria de Creación Literaria. Primer premio de la sección de poesía de la XXV edición de los Premios de Creación Literaria de la Facultad de Humanidades de la Universidad de La Laguna. Actualmente es redactora de Cyrano Producciones.

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